Un reciente estudio, realizado a 10.754 participantes de 10 países del mundo entero, ha revelado que, pese a que el polvo es motivo de preocupación y la motivación principal para limpiar, sorprendentemente muy pocos saben lo que se esconde tras él. Elo estudio ha sido realizado por la firma Dyson.
Aunque el 59% de la población mundial limpia más a menudo desde el brote de la COVID-19 y un 66% de los participantes españoles están preocupados o extremadamente preocupados por el polvo en sus casas, muchos desconocen la fuerte conexión entre el polvo doméstico y los virus, así como otras formas de vida microbiana.
El polvo doméstico es una matriz compleja de células muertas de la piel, pelo, heces de ácaros, bacterias, virus, moho, insectos pequeños y otras fibras
«Son esos componentes invisibles los que pueden perjudicar nuestro bienestar», explica Dennis Mathews, investigador científico en microbiología para Dyson. «Por eso, es crucial que todos entendamos lo que es el polvo doméstico, incluso el polvo que no podemos ver, y cómo eliminarlo eficazmente. Si la gente fuera más consciente de lo que hay dentro de su hogar, en el polvo, y de cómo crece, quizás mostraría más interés en saber en qué debe concentrar su atención y su tiempo al limpiar y por ende, beneficiar a su bienestar». De hecho, este estudio ha demostrado que 1 de cada 5 personas encuestadas a nivel internacional se sorprendieron al descubrir que los virus pueden estar presentes en el polvo doméstico y menos del 5% sabían que los ácaros y sus heces suelen ser los principales componentes del polvo. Es más, las heces de los ácaros se consideran los inductores principales de las alergias a nivel mundial.
Como señala Dennis: “Existe un debate entre los expertos sobre el papel que desempeña el polvo en la transmisión de enfermedades. Los estudios iniciales indican que hay relación entre el polvo y las enfermedades, pero todavía nos hace falta seguir investigando para comprender hasta dónde llega dicha relación.» y subraya: «lo que esta investigación nos ha enseñado es que, a nivel mundial, necesitamos profundizar en el conocimiento acerca de lo que podemos encontrar en el polvo que tenemos en casa». También, añade que “tras la pandemia mundial, que nos está haciendo pasar más tiempo en casa, es importante darnos cuenta de que esas partículas microscópicas que perjudican nuestro bienestar se encuentran en el polvo que tenemos en casa, incluso limpiando a diario».
«Esperamos que esta investigación demuestre que, cuando se trata del polvo, no debemos ignorar esas partículas microscópicas que tanto nos perjudican. No debemos conformarnos con limpiar solamente lo que se ve» insiste Dennis.