La desinfección de superficies se ha convertido en un elemento fundamental de la vida cotidiana desde la llegada del coronavirus. Más allá de la desinfección de manos y la utilización de mascarillas, limpiar y desinfectar el entorno en el que nos movemos es esencial para evitar que el virus prolifere en el ambiente.
Según los datos de la Sociedad Española de Epidemiología, un 16% de los contagios que se han producido desde el inicio de la pandemia serían a causa del contacto con superficies y objetos que no estarían correctamente higienizados y desinfectados, y estarían contaminados por la Covid-19.
Expertos del Ministerio de Sanidad ponen el foco en las medidas higiénicas necesarias en el hogar, así como en otros espacios por los que pasamos a diario. Los pomos de las puertas, la cocina y el lavabo, objetos que se usan con frecuencia como teléfonos, o los vehículos personales tienen que ser higienizados y desinfectados tras su uso.
La Covid-19 puede sobrevivir dos horas en el cobre, un día en el cartón, dos días en el acero inoxidable y la madera, y hasta tres días en los plásticos.
“Limpiar no es sinónimo de desinfectar y viceversa. Para lograr la máxima seguridad, debemos ser conscientes de la importancia de limpiar espacios y objetos y, posteriormente, desinfectar con productos registrados y con certificación de virucida elaborados específicamente para inactivar el virus. Solo así aseguraremos la eliminación total de rastros de Covid-19”, asegura Guillermo Picabea, Responsable Veterinario de Laboratorios Bilper Group.